“Buscándole la quinta pata del gato” Me doy el permiso de ser yo y reconocer que el amor está presente.

Hay momentos en la vida en que “le buscamos la quinta pata al gato” ¿Por qué será que esto sucede?, ¿Qué motiva buscar más allá?, ¿Qué podemos sacar de ésta búsqueda? Intentar escribir sobre el amor, desde la absoluta ignorancia, es una acción desesperada de encontrar respuestas en el único sitio posible o disponible, en mi misma.

Este es un escrito que no sé si será concluido, es un escrito y nada mas… Me motiva escribirlo el derecho a la libertad y también del valor que le doy al amor. Amor en el estricto sentido de una emoción algo que está o no está, algo que es fuera del pensar, que surge o no surge, una emoción como todas las emociones, sin voluntad de ser, solo eso, un sentir. La libertad un precepto condicionado a su vez por la emoción del amor, porque para mi la libertad la condiciona única y exclusivamente el amor que siento.


Hasta ahora logro distinguir que me permito ciertas cosas cuando el amor está presente. ¿Qué hay cuando no está? ¿Dónde hallar amor? ¿Cómo disparar esta emoción en mí? Me doy cuenta también que al decir ésto me privo de algunas cosas cuando la emoción no está presente, siento entonces que mi capacidad de apreciar esta condicionada a una emoción.

Creo entonces que debe haber alguna cosa que me permita sentir con el corazón lo que con el pensamiento distingo como amor. Puedo ver que el amor puede estar presente aun cuando no lo siento. ¿Cómo puedo integrar mi pensar y mi sentir? ¿Cuándo me doy cuenta de que el amor está presente?

A ver… Siento ahora que voy a comenzar a regodearme entre preguntas que me llevarán a otras preguntas sin fin.



Paso entonces a escribir cosas que salen de mí:

• El amor está presente cuando hay armonía. Entre yo y el otro, sea quien sea esa otra persona. ¿Y qué es la armonía para mí? “Armonía es que mi música y tu música suenen bien juntas”
• El amor está presente cuando puedo ser libre de ser yo y mi libertad no te ofende. Ser libre de ser yo es poder reservarme algunas cosas mías solo para mi y que no se interpreten como que te estoy ocultando algo o te estoy engañando. “Yo no necesito saber lo que tu no me quieres mostrar y solo acepto de ti lo que quieres compartir conmigo”.
• El amor esta presente cuando soy libre de manifestarlo de cualquier forma. “Puedo amarte y sentirme amada de infinitas formas posibles”, puedo transformar la manifestación pero no la emoción, mientras exista hallaré la forma de encontrar el cómo manifestarla y también de encontrar como me la manifiestas, porque simplemente “me hace sentir feliz saber que parte de tu amor tiene que ver conmigo”.
• El amor está presente cuando en mis crisis tu estas incondicionalmente acompañándome y cuidándome, por lo tanto yo “te acompaño y te cuido para demostrarte y sentir que también te amo”.
• El amor está presente cuando otras emociones están y yo no te borro de mi existencia, “te amo aun cuando siento otras cosas” y sé que te amo porque aun así sigues estando allí sin desaparecer de mi pantalla, tu estas presente aun, solo estas.
• El amor está presente cuando me siento tranquila en medio de la tempestad, cuando todos corren, gritan y no se distingue salida. En la tranquilidad sé que alguien me ama y ese alguien, si supiera como, haría todo lo posible porque yo esté bien, solo con eso estaría contento porque le produce alegría mi bienestar y no espera nada a cambio. Yo también “haría todo por contribuir con el bienestar de quienes amo y me alegra su sola existencia”.
• El amor está presente, cuando sin condiciones ni amenazas, esperan de mi una mirada y una sonrisa. Cuando me entero de eso, el amor se hace presente y me abraza. “Cuando me siento abrazada por el amor y no por el control, el amor está presente”.
• El amor está presente cuando elijo correr ciertos riesgos y tomar el camino “no seguro”. Porque sé que estoy buscando salir de mi espacio de comodidad y que “puedo contar conmigo si me pierdo y que no me abandonaré”, se que necesito saber qué soy capaz de hacer y qué soy capaz de sentir para poder cuidarme yo, cuando sola me toque estar.
• El amor está presente cuando te echo de menos y cuando sé que me extrañas. “De ese sentir no queda otra cosa que un reencuentro”, porque el deseo sigue presente. Y cuando ya no te extrañe más, el amor seguirá presente porque podré recordarte y podrás recordarme y entonces en nuestra mente y corazón se juntarán las partes y le darán vida a ese nosotros que alguna vez fuimos.
• El amor está presente y es libre de no estarlo, no depende de mí que sea ni de ti tampoco, él solo es y está cuando es y está, y nada ni nadie puede hacer que aparezca o desaparezca. “Es mentira que por dar demasiado amor me tenga que quedar sin nada” dice Jorge Bucay. Yo intuyo, por tanto, que soy fuente inagotable de amor y me doy cuenta hoy que nadie está obligado a amarme, por lo tanto yo tampoco estoy obligada a hacerlo. Puedo agradecerte, retribuirte, reconocerte, apreciarte, intentar ser justa y bondadosa por decisión, sin embargo, cuando sienta amor o cuando tu sientas amor esa emoción será independientemente de lo que yo decida o tu decidas, esa emoción estará, fluira de alguna forma y será recírpoca.

Me temo que mis preguntas se quedarán sin respuestas todavía por algún tiempo. ¿Y qué? ¡Así es y ya! y no pasa nada. Y no tengo la obligación de hacer nada al respecto aunque reconozco que siento el impulso de hacerlo pero sola no me corresponde porque en asuntos de dos no hay nada que solo uno pueda hacer, muchas veces cuando hablamos de amor se trata de un nosotros y otras tantas se trata de yo conmigo, de yo con algo y de yo con todo. Lo único que puedo hacer es darme cuenta que al menos yo quiero hacer algo y solo puedo esperar que tu quieras y entonces cuando coincidamos hacerlo juntos.