Vivimos una era de transición cultural que posiciona valores antagónicos a los que tradicionalmente sustentaban las operaciones de los negocios. Donde el enfoque determinista de Newton del “ordenamiento cósmico” da lugar al pensamiento complejo y al holismo, donde danzas entre aproximaciones usando flexibilidad mental para luego volver a tus lugares de comodidad, confort buscando auto-preservación y disfrute. Donde “la ciencia de la inestabilidad” (Prigogine) nos muestra la necesidad de desarrollar competencias para convivir con la confusión y las diferencias propias de la inestabilidad.
¿Cómo vivir en el mundo que ahora tenemos? ¿Cómo trabajar y relacionarnos? ¿Cómo hacer y por dónde empezar a navegar en este río donde desembocan tantas vertientes como mundos individuales hay en cada cabeza de los que conformamos es esta sociedad?
¡Que empastichamiento tan brutal! Muchos de nosotros los seres humanos estamos buscando: libertad individual, aprendizaje continuo, participación económica, cooperación auto-preservadora “no abnegada”, desarrollo humano y encontramos: mando y control, centralización del poder y la economía, burocracia y regulación excesiva con patrones de “equidad” cada vez mas injustos y desconectados de las verdaderas necesidades individuales del ser humano.
Personas innovadoras como Dee Hock, Fundador ex CEO de Visa, le da al mundo una experiencia a la que él mismo denominó CAORDICA para mostrar como se puede emular a la naturaleza creando un sistema empresarial para asociar miles de diferentes bancos mediante un elemento -que en este caso- fue la tarjeta visa: 22.000 bancos haciendo dinero mediante esta innovadora organización que respaldada tras la marca visa. Estudiar sus principios es una de las formas para surfear en esta nueva distinción para interpretar esta realidad. http://conocimientolibre.wordpress.com/
Como herramientas para gerenciar el caos el investigador (Morin 1996) sugiere: La Dialógica, La Recursividad Organizacional y El Hologramático) ¿Qué rayos es esto y cómo se come? Muy bien él explica que:
- La práctica de la dialógica: está en aprender a aceptar la convivencia entre el orden y lo desorganizado, entre lo complementario y lo antagónico, entre el ying y el yang ambos en uno. En este orden de ideas, Charles Handy recomienda “que aprendamos a equilibrar los opuestos”.
- La Recursividad Organizacional: es dar paso al paradigma de que los productos y los efectos son al mismo tiempo las causas y los productos de quien los produce, eso quiere decir que no es uno primero que el otro sino los dos al mismo tiempo.
- Lo Hologramático: es reconocer que la parte esta en el todo y el todo está en la parte, es decir que es importante comprender los fractales como partes del todo y el todo en cada una de las partes, te invito a ver el concepto en éste video: http://es.youtube.com/watch?v=uas_HJNAzfw
¿Por donde empezar?
Quizás luce un poco descabellado lo que voy a escribir, ya que el tema del “éxito” es uno de los mejores y más vendidos en las librerías a personas que están en la búsqueda de la satisfacción, y lo que digo es lo siguiente “Renunciemos en ir en post del éxito o mantener encadenado al éxito para aprender a innovar”. La verdad es, que no estoy diciendo que no nos vamos a topar con el éxito, sino que la única forma de encontrarlo es movernos a reinventar lo que ya esta hecho, a innovar en creativas aplicaciones, en mejorar lo que existe, y así solo así, disfrutar del encuentro fortuito con el éxito, porque es muy probable que el exito pase por el mismo lugar que tu, si estas en el ejercicio de la innovación.
Winston Churchil nos dice, "Las personas a menudo tropiezan con la verdad, pero por lo general se levantan y se dan prisa para hacer lo que tenían pensado" ¿Por qué nos resistimos a cambiar la forma que “hoy” ya no es exitosa y desarrollar una nueva forma? Es como que si sintiéramos la necesidad de auto aprobación de que es y será así como yo digo y no como dicen otros y yo no digo, manteniendo posiciones para demostrar la probidad de lo dicho y lo hecho, como que si eso fuese realmente lo importante. ¡Que tontería tan desgastante! Dejemos de negar la forma de pensar del otro, sus preferencias, necesidades y deseos. Aprendamos a aceptar que podemos encontrarnos casualmente, o a ceder e inventar la forma para que el encuentro se dé, si es y está presente en realidad el deseo de encontrarnos y que las relaciones trasciendan.
Convivir con el riesgo requiere determinación, flexibilidad y un código nuevo para conectarnos y transitar juntos lo que queramos en este recorrido que llamamos vida. Buscar un propósito puede darnos la suficiente amplitud para crear diferentes e infinitas formas de cumplirlo. "La vida es lo que te va sucediendo mientras tu te empeñas en hacer otros planes", dijo Jhon Lennon.
¡Deseo para ti una semana para aprender a aceptar las discontinuidades como una vía para la re- creación de lo que deseas!
María Mercedes Gómez M.
mm@geneticadelcambio.com.ve
2 comentarios:
Hola MM, ¡Buenos días!
Gracias por la publicación de este artículo. Era el artículo que estaba queriendo leer y no lo sabía.
Últimamente se me desorganizaron muchas cosas, y sentía que esto resultaría en algo bueno, pero no comprendía cómo.
A mí que me gusta esto de dejar huella, de trascender, no me entraba en la cabeza, cómo es eso de que las organizaciones trascienden aún a pesar de desorganizarse.
Una gran dosis de flexibilidad, ver visión total de lo parcial y parcial de lo total, tener convicción, mucho de esto se sacude ante el desorden. También el amor, la libertad, se prueban en el desorden.
Me pregunto como tú: ¿Cómo vivir en este nuevo ambiente? En gerundio claro. Esto ha sido así siempre. También trabajar y relacionarnos.
Por dónde ingresar al caudal del río, y buscar navegar a mares de paz, pues mojándonos los pies en las orillas y saltando muchas veces hasta por cataratas y rápidos que nos llevan a mundos desconocidos.
A mí siempre me gustó el pasticho, y me lo como capita tras capita. Disfrutando incluso de lo que aparece frente a nosotros como monstruos, como las “anacondas” de la película que sufrí viendo al lado de Alexander Daniel hace un rato, y que insistía en mi mente ante el horror, “es ficticia”, y cerraba los ojos para no ver aquello tan feo.
Mucho de lo que vemos es ficticio, y el miedo que nos da está relacionado con nuestra historia.
De Hock aprendí a ver las cosas con calma ante el caos, y he tenido que llamarlo para que me ayude a verme, y fijar mis ojos en lo que no puedo ver.
A mucho de lo que acudes le echo mano, pero debo cuidar de no quedarme enpastichado, porque no me lleva a un buen destino.
Lo que estoy viviendo es lo opuesto a lo que deseaba, o creí que deseaba, o alguien lo deseó por mí, y me lo creí.
Ahora busco el equilibrio y vendrá. Quedarse tranquilo funciona a veces y comienzas a mirar lo que ya habías visto, pero con los ojos refrescados por las lágrimas del dolor.
A mí que el éxito me acompaña todos los días no lo busco. Salgo por él. Y me gusta tu propuesta de buscar las cosas nuevas. A mí me ha llegado el momento de buscar lo nuevo en mi vida, y pasaré por muchas “exit”, y será común pero nuevo será el camino.
Me tropiezo con la verdad, y me quedo caído en ella, y es mejor.
Voy sucediendo en mi vida, y suceso tras suceso disfruto de lo que se pinta en el territorio. El mapa no es el territorio, y estoy recorriendo el nuevo territorio, para dibujar los nuevos mapas.
Gracias por la reflexión,
Adrián
Adrián:
Los desatres muchas veces surgen cuando el desequilibrio se hace presente. Es lo natural, incluso en lo humano, nos desequilibramos muchas veces.
Despues del desastre, cualquiera que sea, la vida se abre camino inebitablemente.
Y entoces Dios nos premia y hace salir el sol para todos por igual para recordarnos que todos somos reconocidos por Él y que le importamos...
Solo se me ocurre decirte que cualquiera que sea el error, con valentía, verdad, acciones de compromiso, buena fé, optimismo y trabajo, mientras haya vida, se remedia ¡Así es y será!
Gracias por tu comentario y fidelidad al leerme.
MM
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